- PERSPECTIVA DE LA TIENDA
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - VISTA EXTERIOR DE LA FACHADA PRINCIPAL
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - VISTA EXTERIOR DEL LOCAL
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - VISTA INTERIOR DE LA ZONA DE LUMINARIAS
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - VISTA INTERIOR DE LA TIENDA
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - PLANTA PRIMER PISO
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41 - CORTE A-A
REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-41
1960
“El nuevo local de la Casa E. Ferrand y Cía., en la calle Diez Canseco, a pocos pasos de la Avenida Larco en Miraflores es una prueba más de la tendencia de las entidades comerciales de nuestro medio a recurrir a la buena arquitectura como uno de los más eficaces medios de atracción del público; tendencia que esperamos se haga cada vez más pronunciada en el futuro y que tenemos la plena seguridad se verá justificada sobre todo en el caso del presente proyecto que publicamos.
Por la sencillez y claridad de la distribución, que nuestros lectores apreciarán en los planos que acompañan a la presente información y que representan una de las mayores ventajas del proyecto, éste no necesita de mayor explicación por nuestra parte. Los aproximadamente 500 m2 disponibles en la planta baja han sido aprovechados casi en su integridad para espacio de ventas, existiendo al fondo del terreno una pequeña zona de servicios, con depósitos de mercadería, etc. Como dato interesante podemos señalar, que uno de los servicios higiénicos allí dispuestos, el previsto para el uso del público, sirve a la vez de muestrario de los aparatos y accesorios relacionados con la venta de la casa. El área de ventas, propiamente dicha, ha sido dividida por medio de muebles y biombos de exhibición, en dos zonas, dedicadas a la exhibición y venta de útiles de cocina, sanitarios y otra mercadería del género por un lado, y cristalería, cubiertos y otros artículos de menaje y decoración de la vivienda por el otro.
Cada una de estas zonas es accesible a través de una entrada particular, por una amplia mampara de aluminio en la fachada, que por sus grandes ventanas les permite a toda la tienda convertirse en escaparate. La zona de administración ha quedado dispuesta, en forma lógica en el mezzanine.”
Fuente: REVISTA: La Nueva Tienda de E. Ferrand y Cía. (1960). El Arquitecto Peruano, 279-280-281, 39-40
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